jueves, 5 de agosto de 2010

4:02 am

Sí, es jueves por la madrugada y yo aquí, sin nadie a mi lado, sin nadie que me escuche, tan solo este blog.
Se siente un ambiente hostil en esta fría y sucia habitación, pero con inolvidables momentos.
Aveces es tan extraño todo, la forma en la que como uno mira las cosas, siempre desde distintos prismas, claro.
¿Por qué será que las madrugadas son así? empiezo a sentirme solo, ya todos duermen, yo debería, pero algo me jode.
El interminable silencio madrugador puede llegar a ser tan triste...ya se escuchan aquellos pajarillos de los que salen por las mañanas. Aun así, no dejo de sentir ese triste silencio que atormenta mi mente, que hace que sienta aquel nudo en la garganta, que hace que tenga ganas de desistir.
Las ideas dejan de fluir como antes, dejan de ser las mismas y no sé por qué.
Ya no sé si creer plenamente u olvidar, tan solo no quiero creer que cierto será.
Qué joda es esto. Un dilema es si la soledad en esta madrugada es buena o mala. Nada de lo que digo tiene sentido, o tal vez sí.

Malditas madrugadas, no todas siempre tienen que ser buenas.